Mews Project, como dice su fundador Alfonso, no es una marca de ropa sino un proyecto. Un proyecto de moda amable y tranquilo, que se aleja del concepto de fast fashion sin renunciar a su carácter urbano y cosmopolita.

El nombre viene de los mews de Londres, pasajes escondidos en el centro de la ciudad llenos de encanto y personalidad. Alfonso, que había vivido en varias ciudades del mundo, encontró en esta palabra la definición exacta para su proyecto.

Aunque Mews Project nació en Madrid, la idea surgió cuando vivía en Barcelona. El auge del slow fashion y las tiendas independientes en la ciudad condal le sirvieron de inspiración para plantear las bases de su proyecto. Todas las prendas de Mews Project se confeccionan en pequeños talleres locales, lo que a Alfonso le permite permanecer cerca durante todo el proceso ya que es él mismo quién realiza los diseños de las prendas.

Alfonso nos ha contado que su inspiración le viene de todos los lugares donde ha vivido y ha viajado por lo que el diseño de cada prenda es diferente y único aunque todas ellas comparten una misma línea creativa. Son prendas versátiles, optimistas y que invitan a disfrutar de cada momento del día. Además su objetivo no es lanzar colecciones sino lanzar prendas realizadas con amor y calma.