Carmen estudió Artes Aplicadas a la Madera en Madrid, y no sabía que una de las asignaturas que iba a cursar le iba a cambiar la vida. En la clase de Cuero comenzó a practicar con este material y decidió comprarse herramientas para poder seguir practicando en casa. Al acabar sus estudios, estuvo trabajando con grupos de chicos jóvenes con los que restauraba muebles en una fundación.

Sin embargo, Carmen quería ser dueña de su día a día y que su trabajo le divirtiese. Por ello, decidió retomar el cuero y fundar su propia marca de complementos, Carmen del Olmo. De esto hace ya 17 años, durante los cuales sus diseños y su técnica han evolucionado ya que empezó cosiendo a mano sus bolsos y complementos. Carmen diseña y confecciona ella misma cada pieza, tiñe la piel mezclando los colores primarios para obtener el color deseado, dibuja a mano alzada cada diseño y en su nueva colección que presenta en Ventana de la Cebada ha incorporado la técnica del transfer y la serigrafía.

Sus diseños se inspiran en formas orgánicas, con líneas limpias y círculos llenos de color.